lunes, 14 de julio de 2014

Libros nuevos y noticias veraniegas

Bueno, bueno, aunque aún tengo pendientes algunas reseñas, hoy toca un post 'publicitario'. Hace unas semanas Fernando Carredano me hizo llegar muy amablemente su novela La cena de los caníbales. Aún no he tenido tiempo de hincarle el diente, pero la tengo en mi lista de lecturas de verano. Una de las cosas que más me ha llamado la atención de la campaña de promoción de Carredano es que, poco después de recibir la novela su editoria, Almudena Muñiz, volvió a contactarme para darme una nueva versión adaptada según las críticas y comentarios de los primeros lectores. ¡Me ha encantado la propuesta! es una forma extraordinaria de aprovechar la rapidez de la red y la diversidad de opiniones que a través de ella se pueden obtener. Aunque es una maniobra arriesgada ya que nunca llueve a gusto de todos y cambiar la obra 'a demanda' de los lectores puede ser un juego infinito, como experimento me parece muy interesante. Tengo muchas ganas de leerla. Mientras tanto os dejo un poco de información:
La cena de los caníbales
La guionista Desiré Juárez acude a la cena de navidad de la productora en la que trabaja. Allí será recibida por su jefe, un ambicioso y turbio empresario audiovisual que ha insistido en invitar
también a la prensa especializada, pues la celebración no es más que una excusa para presentar en sociedad la serie de televisión que ha estado produciendo durante los dos últimos años.
Una vez en el restaurante, entre canapés y excesos alcohólicos, quedará al descubierto la verdadera cara de los invitados, y a través de sucesivos flash backs se irá desvelando una trama de feroces luchas profesionales.
La podeis encontrar aquí: Amazon.



Y por otro lado, a título más personal, mi blog de manualidades Hilo, papel y tijeras desaparece (oooooooooohh) pero no con él mis diseños y creaciones. Junto a mi amiga Bea lanzamos Le Petit Boutonnière una página de creaciones artesanales donde podeis seguir encontrando fundas de e-reader artesanales y personalizadas, broches, marcapáginas, y además, un montón de cosas nuevas todas super originales y hechas con todo el cariño del mundo. ¿Por qué no os pasais? iremos actualizando periódicamente con nuevos diseños y creaciones, así que si os gusta apuntaros al blog! o seguidnos en nuestro facebook
http://lepetitboutonniere.blogspot.com.es/

Reseña: Trilogía del Baztán. Legado en los huesos

Y recién terminado El guardián invisible pasé, como si simplemente pasara de hoja, a Legado en los huesos. Hay una continuación casi natural entre los dos libros que, aunque distan entre sí unos buenos 8 meses de tiempo de la novela y menos de un año en tiempo real (aunque ya sabemos que eso para un lector enganchado equivale a una eternidad), se pueden leer perfectamente como uno solo.

Volvemos a reencontrarnos con la agente Amaia Salazar que a la luz de los acontecimientos que se relataron en El guardián invisible ha sufrido una transformación personal y profesional evidente. Su marido perfecto sigue siendo perfecto, la tía Engrasi sigue siendo un personaje encantador que da vida a todo el pueblo de Elizondo. En fin, volvemos a lo que ahora ya es un lugar conocido donde el mal vuelve a cernirse. Quizás por eso ahora la autora decide tomarse los ataques en el Valle como algo más personal tanto para los personajes como para el lector. Y lo consigue. Es imposible no sentirse herido en lo propio por la desfachatez de los actos criminales ahora que conoces el lugar.
El nuevo caso, que esta vez se ramifica en una historia ligeramente más compleja que avanza a lo largo de tres investigaciones separadas, comenzó en el libro anterior como una sugerente pincelada discordante que al terminar el epílogo resaltaba poderosamente. Ahora, Dolores Redondo apunta esa pincelada que se extiende generando este nuevo argumento tanto o más intrigante ( e intrincado) que el otro y que nos vuelve a asomar a las tripas del trabajo policial y a la ventana personal que nos aboca a los problemas familiares de Amaia.
En El guardián invisible nos encontrábamos a una protagonista cientificista que rehuía de las explicaciones mitológicas o mágicas que su tía, una consumada echadora de cartas de la que no nos cabe la posibilidad de ridiculizar por ingénua ni en una sola ocasión, trataba de convencer de que su descreimiento era injustificado. Ahora parece que la tía Engrasi arrastra cada vez más a Amaia a su terreno y el plano más 'realista' es invadido poderosamente por el aspecto 'mágico' en un desequilibrio que transforma el conjunto en algo más 'ficticio' (¿cabe este adjetivo para hablar de una novela?) que su predecesora. Tal vez este viraje sea la única pega que puedo poner a un libro que en general me ha gustado mucho mucho.
Encuentro en ese repentino protagonismo mágico ecos de una tendencia presente en otros libros y películas. Me vienen a la cabeza la película Luces Rojas o la serie True Detective ¿Qué problema hay con que los personajes cínicos, cientificistas o escépticos, que niegan la existencia de fantasmas, providencias, basajaunes o damas del lago sigan siendo escépticos,
cientificistas y cínicos al final? ¿por qué ese empeño en 'convertir' a los no creyentes? el acoso y derribo que sufren los que no comulgan con lo paranormal es incesante y parece que no puede darse un cierre completo si no hay una conversión, a lo Pablo de Tarso, en el último momento. "La verdad está ahí fuera" decían en Expediente X donde no cejaron en el empeño de convertir a Scully en una creyente (Believer que no Belieber, por el amor de Dior) dejando la 'puerta abierta' a la explicación paranormal (cuando todos los que veíamos Scooby Doo sabemos que no hay caso paranormal que no pueda ser explicado por un malvado empresario disfrazado y una mesa de efectos de sonido). Bueno, con cariño y sin acritud, respetando mucho las creencias de todo el mundo y desde el respeto que me produce tanto el trabajo de investigación sobre la mitología del Valle de Baztán así como la gracia a la hora de introducirla en el relato, en esta ocasión tanta mágia y tantos giros motivados por 'lo inexplicable' me resultan un poco cargantes. Sobretodo porque la trama ya es lo suficientemente potente por sí misma, no hace falta añadirle elementos mágicos que la hagan brillar porque ya brilla. Como diría Jordi Cruz en Masterchef: Si el producto es bueno no le pongas nada más. Si tienes una Langosta no la hagas con gambones y vieiras, la langosta luce sola (bueno, más o menos, ¿conocéis a las Gurmés?).
Pero bueno, salvo por esta crítica, con Legado en los Huesos, Dolores Redondo se reafirma en el panorama literario con una novela que no tiene nada que envidiar al mejor thriller americano.
He leído por ahí que la trilogía se convertirá en cómic y también en peli. Yo con que en breve se publique el final me doy por satisfecha ya que, aunque cada novela es autoconclusiva, los hilitos sueltos que la autora deja colgando de las costuras, aunque son pequeñitos, aunque casi no se ven... ¡¡¡Me llenan de curiosidad!!!

martes, 1 de julio de 2014

Reseña: Trilogía del Baztán. El guardián invisible.

Al final no sé para qué pongo el orden en el que voy a subir las reseñas porque al final las subo de otro modo, en fin... ¡Lo siento! y siento también la tardanza pero ya sabeis, fin de curso, exámenes (todo aprobado, ¡bien!) y demás quehaceres (de todo menos ir a la playa, sigo blanca nivel lectura de interior). Pero bueno, vamos al turrón que es lo que importa.

Mi tío, al que los libros se le suelen alargar mucho en la mesilla de noche, me recomendó esta novela con la frase 'Me lo leí en una semana'. Dicho y hecho, no se equivocó con los de Carlos Sisí y con tan prometedora publicidad  la trilogía de Dolores Redondo no podía defraudarme. Y efectivamente, a mí también me duró una semana, pero no solo el primer libro, sino el primero y el segundo. Hacía tiempo que no me ponía a leer sujetándo el kindle en una mano mientras removía los fideos en la otra, pero los libros lo merecen.
Lo de leer mientras cocinas no es una idea del todo buena...

Cabe decir que comencé a leer la novela con el convencimiento de que tenía entre manos una novela americana de misterio (cosas de usar el kindle y entrar en los ebook sin fijarme apenas ni en el título, ni en el autor ni, mucho menos, en la portada). Nada más lejos de la realidad. La autora es autóctona y el emplazamiento de su historia también. Ya sabeis que no suelo ser fan de los autores españoles. No hay ni prejuicio ni intención, simplemente me atraén más géneros que han sido cultivados con más frecuencia (y en ocasiones con más acierto) por autores extranjeros. En todo caso,  tomar conciencia de que eso de Trilogía del Baztán tenía que ver con el Valle del Baztán, sito en la Comunidad de Navarra, me entusiasmó. Me encantan los parajes del Norte de España, me llenan de curiosidad la historias que toman tierra en espacios conocidos, así que empezábamos con buen pie.
Pero, ¿de qué va? pues El guardián invisible relata la investigación de una serie de asesinatos por parte de la policía foral de Navarra. El equipo, con Amaia Salazar al frente, debe encontrar al culpable que ha asesinado a varias niñas, dejando sus cuerpos sin vida en el Valle, antes de que vuelva a atacar. Amaia, que ha trabajado en el FBI y cuyo marido (alias hombre perfecto) es un conocido artista americano, no es la típica policía de barrio precisamente. Ello contribuye a que la historia, aunque no pierda su contextualización vasca en ningún momento, crezca en un ambiente más propio de True Detective que de Los Hombres de Paco y eso se agradece.  
Podríamos decir que la línea argumental principal se concentra en el caso criminal y su resolución así como los giros que este va sufriendo, mantienen en vilo al lector. No obstante, de forma completamente pareja se desarrollan dos subtramas que tiran de la curiosidad de quien se adentra en la lectura, casi con la misma intensidad. Una de ellas la configura la realidad personal de la agente Salazar, su familia, los entresijos que la han llevado a la situación delicada en la que la encontramos cuando comienza la novela, los secretos que se ocultan en el pasado y las interferencias que provocan en el presente. La segunda es la que golpea rítmicamente la realidad cotidiana e indiscutible de las otras dos con la bella y mágica mitología vasca que, una y otra vez, amenaza con tomar cuerpo y arrebatar de sus guías cualquier planteamiento cientificista que se trace en la historia.
Amaia Salazar es uno de esos personajes con los que te encariñas desde la página uno. A caballo entre su carrera profesional y su vida profesional, es una mujer fuerte a la que en ocasiones su vida personal la supera. Por algún sitio he leído que se compara con la agente Clarice Starling de El silencio de los Corderos. Yo, desde el conocimiento que me dan las películas (no me he leído las novelas de Harris, pero es material pendiente), no veo esa similitud. Starling renuncia a tener familia para dedicarse plenamente a su trabajo, Salazar se enfrenta a la titánica tarea de ser la una excelente profesional y llevar adelante todos sus proyectos personales y familiares. Clarice proviene de una familia rota, cierto, y desde muy joven tiene que enfrentar la realidad de verse sola en el mundo (queriendo, en el impass, salvar a ese pequeño corderito que gritaba en la noche); pero la historia familiar de Amaia no es que sea dura, es que es cruel. En ambas su niñez condiciona su moral, régia y salomónica, pero de la honorable americana tipo en la que se convierte Starling a la pasional vasca que representa Salazar hay un océano atlántico y toda una historia cultural de distancia. Por eso para mí Amaia es un personaje con un caracter muy particular, muy propio y poco comparable, sino es en líneas muy generales, con otras 'mujeres policía'.
Si Amaia representa el aspecto formal, racional y en ocasiones hasta burocrático, el contrapunto lo representa su tia Engrasi (Como en las novelas de Kate Morton, aquí la voz predominante es femenina, los hombres parecen meras comparsas. Nada de lo que quejarme, simplemente es un apunte). Una mujer entrañable, que echa las cartas con un convencimiento capaz de hacer dudar al más escéptico. Es el corazón de la casa de Elizondo, pero también el eje principal que permite darle una oportunidad a la mágia que circunda la historia. Engrasi es quien posibilita el puente entre la realidad y lo mitológico, la que le da el peso suficiente para que los personajes máginos toquen tierra durante unos minutos y luego se desvanezcan. Otro gran personaje sobre el que pendulan tantas dudas irresolutas que más allá de la letra escrita te permite fabular sobre su historia.

Así pues, además de un thriller estupendo tenemos un elenco de personajes interesantes y de unas particularidades psicológicas intrigantes a los que apetece conocer cada vez más y más. Todo ello salpicado por giros espectaculares en los que el folklores vasco y la mitología del Valle parecen confundirse de manera que la línea entre realidad y fantasía por momentos se desvanece casi por completo.Una novela estupenda, encantadora de leer y que combina acción, emoción, terror y mágia en un equilibrio increíble.
Y así fué que no bien había cerrado las tramas principales del primer volumen, la autora me indicó que los flecos sueltos empezaban a tejerse en el segundo. ¿Cómo no empezar a leer Legado en los Huesos inmediatamente?